Ashley POV*
Si bien se podría decir que mi vida estaba mucho mejor, aun estaba un poco preocupada por el viaje. Aunque no mucho después de lo que paso en estos días.
Charly y yo somos novios, al igual que Adrián y Annie, a la cuál le debo bastante. Mi abuelita es feliz, si nosotras somos felices, quería acompañarnos al viaje, pero yo insistí en que era peligroso, sobre todo si teníamos una visita no deseada por parte de nuestros “amigos” los Galeazzi.
Vivíamos en el número 84 High Street en Yeadon, una ciudad pequeña pero muy acogedora a las afueras de la ciudad muy cerca del LBA (Leeds Bradfort Airport) así que el viaje en auto fue de unos 10 minutos por Victoria Ave, hasta la salida al aeropuerto.
− Annie, Ashley ¿llevan su pasaporte? ¿Dónde esta su boleto? ¿Llevan lo necesario en la maleta? ¿Dónde están los papeles de la casa? −repetía una y otra vez mi abuela, creo que ella estaba más nerviosa que yo.
− Estamos bien abuela, no te preocupes por nada −repetia a su vez Annie
− Bien, chicas ya llegamos −dijo mi abuelita entrando al estacionamiento
Bajamos del auto y nos dispusimos a esperara hasta que nuestro avión saliera. Cuando fue la hora, le dimos un gran abrazo y nos subimos al avión.
Fue un largo y fastidioso viaje, por que de la ciudad de Leeds viajamos a Londres, de Londres a Francia, de Francia a Roma y de Roma a Florencia ya que no pudimos conseguir un viaje sin tantas escalas.
Por fin llegamos a nuestro destino, el aeropuerto de Florencia. Pero la cosa no terminaba ahí, pues nuestra casa estaba en Scandicci, una ciudad al sureste de Florencia.
Así que por los menos fueron unas 3 horas en auto, y agradecí al Señor cuando llegamos a nuestro destino. Vivíamos, no se si con cierta ironía, en una calle llamada Via dei Rossi en el número 84 (otra ironía más)
La verdad no era una casa como las que se conocen, era algo parecido a un departamento, pero todos los cuartos nos pertenecían. Cuando mis padres murieron, fue la herencia que nos dejaron. Como ni a Annie ni a mi nos apetecía seguir viviendo ahí, lo vendimos a los vecinos de enfrente.
Nos dieron una buena cantidad de euros por la casa, ya que estaba en muy buenas condiciones y era la más bonita de por ahí.
− Saben, generalmente los negocios con menores de edad no son permitidos, pero como ustedes perdieron a toda su familia, supongo que haremos una excepción −nos dijo el hombre, actual dueño de nuestra casa cuyo nombre no recordaba
− Y nosotras agradecemos esa excepción −dijo mi hermana al ver que no conteste
− Bien, aquí tienen su cheque −dijo entregándole a Annie un cheque con bastantes ceros escritos[1]
− Valla, es mucho más de lo que esperaba −murmuró Annie más para ella que para nosotros
− Si, bueno. La casa esta en perfectas condiciones por dentro y por fuera y es la más codiciada por aquí. Supongo que vale la pena −dijo el hombre mirando fijamente a mi hermana
Yo no pase esto por alto y apresuré a Annie para cerrar el trato e irnos cuanto antes. Si bien este hombre había dado muchísima cantidad de dinero por nuestra casa (cosa que agradecía) no me fiaba mucho de él.
− Señoritas ¿tienen dónde quedarse esta noche? Porque si no tiene morada puedo ofrecer la mía −dijo el hombre
− Oh, eso ya está arreglado. Nos quedaremos con unos amigos que viven muy cerca de aquí. Así que no es necesario que nos ofrezca morada −dije lo más cordial y amable que pude
− Bien, veo que se las arreglaron solas. Que les valla bien en su viaje de regreso, señoritas Rossi
− Muy amable de su parte. Annie, es hora de irnos
Mi hermana no dijo nada y se apresuró a entrar en el auto que habíamos rentado hace unas pocas horas y nos fuimos. Ya en el camino le dije mis sospechas a Annie.
− Sí, ese hombre se comportaba un poco extraño, y me extraño aún más la cantidad de dinero.
− Espero que no sea…un compañero no deseado −dije un poco nerviosa
− No lo creo. Aún así gracias a tu mentira no sabe que nos hospedamos en un hotel, en lugar de con nuestros amigos −dijo mi hermana, intentando tranquilizarme
Seguimos nuestro camino en silencio hasta que llegamos a nuestro hotel, bajamos del auto y nos dispusimos a caminar hacia la recepción. Nuestro hotel era el “Hotel Touring Srl” el cuál se encontraba a unos minutos de nuestra antigua casa.
− Benvenuto. Parli italiano o inglese? −nos dijo la recepcionista del hotel, una chica alta, delgada con el cabello color café oscuro, casi negro. Parecía cansada y algo aburrida
Ignore su pregunta, puesto que Annie y yo hablamos perfectamente los dos idiomas, más el español. Y puesto que no parecía hablar mucho ingles, decidí hablar en italiano.
− Siamo rimasi al telefono. Camera 240 −dije con mi mejor sonrisa
Nos entrego nuestra tarjeta, nos indicó por donde era y nos dijo que si necesitábamos un botones. No lo pensé dos veces y le dije que si, puesto que estaba muy cansada y no quería cargar la maleta. Llamo por el interfono. [2] y segundos después, un chico alto de cabello castaño, algo corpulento apareció por una puerta trasera.
− Can I help with you bags, ladies? −me sorprendió que hablara en ingles, en lugar de italiano, pero no le di mucha importancia.
− Yes, please −contestamos a la vez, cansadas y aburridas.
De reojo pude ver como la señorita de la recepción se quedaba asombrada, aunque no mucho, puesto que el hablar ingles era poco común, pero a fin de cuentas normal en Italia.
− Annie estoy muy cansada. ¿Tú no? Creo que en cuanto lleguemos a la habitación dormiré todo el resto del día, hasta que den pasadas las 5. Después bajaré al restaurante o pediré el servicio a la habitación −dije cuando nos encontrábamos en el elevador
− Pues aunque yo también estoy muy cansada, llamaré a Adrián. Le prometí que lo llamaría lo más pronto posible −dijo con expresión triste.
En ese momento no había pensado en Charly, ¿qué clase de novia era? No había pensado en su rostro, sus caricias ni mucho menos en sus besos. Así que una llamada era lo único que podía darle.
− Tienes razón. Le llamaré y le diré que soy una torpe por no haber pensado en él durante todo este tiempo
− No eres torpe, tu cabeza estaba muy preocupada por algo que no tenía mucha importancia. Y me parece bien que le digas la verdad.
Llegamos a nuestra habitación, le dimos propina al botones y nos dijo que cualquier cosa que necesitáramos no dudáramos en llamar. Abrimos la puerta de la habitación y nos quedamos perplejas, al menos yo, al ver la gran suite que habíamos elegido al azar.
Había dos camas matrimoniales con colchas color chocolate, cada una con cabeceras color ámbar. De cada lado de las camas, había unos lindos buros color chocolate con unas lindas lámparas. En frente de las camas había un lindo tocador empotrado a la pared con una linda silla color blanco. Encima del tocador, había una pequeña televisión pantalla plana. Del lado izquierdo de la habitación, se encontraban unas hermosas cortinas, las cuales corrimos para ver la hermosa vista de Scandicci. Y del lado derecho se encontraba lo que a mí humilde opinión me pareció lo mejor, había un gran armario de puertas corredizas pintado de color beige del tamaño de toda una pared. Más al fondo de la habitación había una pequeña con lo que me pareció ser el baño. Abrimos la puerta y nuestra sorpresa volvió, dentro de la pequeña puerta se encontraba un baño, se podría decir que de tamaño normal, con una gran tina. Toda la pared estaba llena de mosaicos color arena y beige, los más oscuros con pequeños detalles de flores de color negro.
Todo esto lo apreciamos en menos de 5 minutos, pero a mi me parecieron 5 horas. Era completamente increíble absolutamente todo. En este lugar parecía que el tiempo se había detenido.
Annie corrió al teléfono en cuanto dejamos de apreciar la hermosa habitación y llamó a Adrián. Yo esperaría un poco más, pues sabía que su llamada iba a ser muy larga.
Yo abrí la ventana para dejar entrar un poco más de luz y aire a la habitación, y me recosté en la primera cama que vi. Cerré los ojos y sin darme cuenta me quedé dormida.
− Ash, despierta, ya terminé de hablar con Adrián, ahora puedes llamar a Charly −dijo Annie sacudiéndome de un lado a otro
− ¿Cuánto tiempo he dormido? −pregunté confusa y adormilada.
− Como una hora, podrías haber dormido más, pero Adrián me dijo que Charly te extraña mucho, por eso no quise retrasar tu llamada −dijo
¿Una hora? ¿Sólo había dormido una hora? Increíblemente pensé que había dormido muchísimo más, sobre todo por todo lo que soñé.
Tome el teléfono y llame a Charly, nuestra conversación duro mucho, pues le dije todo lo que había hecho desde que abordamos el primer avión.
− Y ¿tú comos estas? −pregunté después de terminar mi relato
− Pues, mal. Te extraño demasiado. No tenemos ni un día de novios Ash ¿sabes lo que es tenerte tan lejos y tan cerca de la vez? −dijo con tono triste
− Muy frustrante, créeme, los sé −dije igual de triste que él
− Ash, no quiero pero debo irme. Mañana me hablas si
− Claro, te amo, no lo olvides. Aunque solo tengamos un día de novios
− Te amo igual. Nos vemos −Y colgó
Suspiré, por desgracia aun nos quedaban dos días en esta ciudad. Genial, este sería uno de los fines de semana más largo de toda mi vida, si no el más largo.
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[1]: Esta expreción se utiliza cuando una cantidad es muy grande. Entre más ceros tenga, más valor tiene
[2]: Para las que no sepan, un interfono es por donde se comunican las secretarias o recepcionistas. Es como un teléfono, pero sin auricular (cosa por donde se habla)
Hola chicas.
No pueden quejarse, el cap esta lo bastante largo como para justificar mi corta ausencia.
Bueno, no tengo mucho que decir, gracias a las que votaron en la encuesta y a las chicas que comentaron. Tenemos un progreso, de 3 nos pasamos a 4. XD
Amm ¿qué más? A sí, les tengo una recomendación y un premio.
Mil gracias a Giova, quién me entrego este premio ya hace tiempo y no lo había puesto. Lo siento, algunas veces no tengo cabeza para nada.
Pásense por su blog, de verdad es genial. Les dejó una parte de su primer cap:
Todo era confuso y no podía ver nada. Estaba en brazos de alguna persona y este corría a una velocidad increíble, el viento me rozaba de tal manera que me quemaba, deseaba que parara pero mis manos atadas me impidieron quitarme la venda de los ojos. Se detuvo bruscamente y me dejo en el suelo, me quito la venda de los ojos y de las manos. Primero me mire las muñecas rotas por la presión y luego mire su cara, tenía el pelo marrón y piel blanca, no pude recordar su nombre por mas que trataba…
Genial no es cierto? Bien, pues si quieren más, pásense a su blog: Renacer
Nos vemos pronto bye, las quiero..!!
PD: ¡Rayos! casi se me olvida. ¿Quieren ver la casa de las Rossi, tanto en Italia como en Leeds?
Solo denle click Aquí, para ver la casa en Leeds. Y Aquí para ver la casa en Scandicci.
Ahora si, nos vemos..!!
Mee encanta
ResponderEliminarpublica pronto
biee n.n
abby(:
AHHH ME ENCANTAA !!! la casa es hermosa chamaaaa y por ciertooo de nada por el premioo chama por cierto disculpa por no publicar antes de verdad ando full con la uniii !!!! pasate por mi blog ya publique capi y deje una info muy importanteee besosss por fa publica prontoo !!! =D
ResponderEliminarwoolax, amginifico cap¡¡!! esta asombroso¡! cuidate y espero de corazon q te hayan gustado mis premios¡¡!! es uan forma de agradecerte que seas fiel a mi blog¡! me encanto lo de Ash y Charly, su pekeña conversacion q nos dejaste¡! cuidate un besote¡! tkm
ResponderEliminaraaaaaahhhh!!! me gusto mucho.
ResponderEliminarme encanto muchisisimo este capitulo. estuvo genial. al igual que tu blog es sensacional. no dejes de escribir nunca. que cuando eres buena en algo no tienes por que dejarlo NUNCA.
no olvides eso. cuando te sientes bien haciendo algo nunca lo dejes.
tus capitulo estan muy buenos (y digo la verdad)
que bueno resivir un cheque asi. jajajaja XD
publica pronto. esta historia esta exelente.
bye bye. y gracias por pasarte por mi blog.
cuidate. besos y abrazos =)♥♥♥